Las luchas
de ayer, las luchas de hoy”
Virtudes
Alvarez
En Honor a las mujeres que valientes
colaboraron con su lucha a la salida de los invasores norteamericanos (1916 –
1924)
Mi consciencia despertó con un grito
aullidos que arroparon una isla
poema de tantas firmas
escrito verso a verso ejerciendo
patria
ador en piel de señoras
tibio hogar para el valor
perfecta armadura perfumada.
El tiempo con su traje de amnesia
sofocó su recuerdo con los días
sus voces marchan de vuelta por las
hojas
amanece el nudo en la garganta
fuego de mis ojos al leerlas.
Su mirada maternal compasiva
descubre una mancha
los invasores, estrago del mudo
tatuados en mi piel
esclavitud electa que se repite de
boca en boca
concepto que asalta cada mente
hasta ser todas.
Mujer unión de todos sus nombres
¡De todas ellas!
Diosa de todas sus manos
¡Corta mi cabeza con tu pluma
rebelde!
reponla de coraje.
Grandiosa madre del pasado
conjunción de sagradas maestras
elixir lácteo que me nutre de patria
¡derriba a bofetadas las vendas!
Enjuaga el hueco donde habitaba el
alma
seca el servilismo con paño paciente
y con un vientre tejido de todos tus
rostros
pújame hacia la vida
oblígame a beber el aire que
conseguiste palabra a palabra.
¡Tu clamor, grito eterno!
es canción de un solo empeño:
Libertad
se presenta imponente
Libertad
se arraiga
Libertad dibujada en sus nucas
se transfunde por mis dedos
camina por mi sangre… ¡Libertad!
¡Única invasión permitida!